Uno de los dispositivos más importantes a la hora de hablar de la topología de una red de internet es, sin dudas, el servidor, una máquina capaz de albergar páginas web y prestar ciertos servicios específicos. Estos activos son como un centro comercial capaz de guardar miles de tiendas dentro de sí.
Sin embargo, hay una tipología de servidor que es bastante interesante, pero no del todo comprendida, y es por eso que hoy te vamos a contar qué usos tiene un servidor dedicado.
Todo el espacio para ti solo en un Servidor Dedicado
Un servidor dedicado es, en síntesis, un servidor en el que la persona que lo compra o arrienda dispone de todas las capacidades de este. Se trata de un hosting convencional, pero a gran escala, pues en la anterior actividad, lo que se hace es rentar un espacio dentro de un servidor para alojar una página web. Son una parte fundamental de los negocios de red, pues permiten crear servicios digitales de un modo más libre.
Cuando se compra o arrienda un servidor dedicado, se pueden guardar todas las páginas web que se pueden dentro del mismo, además de que se puede emplear para ofrecer servicios en un centro de datos, es decir, una sala llena de servidores, tales como DNS (Sistema de nombres de dominio, utilizado para indexar un dominio web con una dirección IP), DHCP (Protocolo de configuración dinámica de Host, que se usa para asignar direcciones IP a servidores, computadores y demás en una red de manera automática).
Alto precio, Grandes Ventajas de los Servidores Dedicados
Si bien el valor que se debe pagar por un servidor dedicado, si se arrienda y, más aún, cuando se compra, es bastante elevado, pues no solamente se paga por la máquina en sí, sino por guardarlo en un centro de datos, así como por mantenerlo, cierto es que con ello obtienes grandes ventajas, que van desde el uso completo de sus capacidades, hasta ofrecerlo para prestar servicios para los centros de datos en los que se encuentra, pasando, por supuesto, por el hosting.
Debido a que los servidores disponen de una gran cantidad de espacio de almacenamiento, un procesador especialmente eficiente, así como alta resistencia a los daños ocasionados por el ambiente, el obtener un servidor dedicado, ya sea comprándolo o arrendándolo, te permite guardar todas tus páginas web en un mismo lugar, además de que puedes tener subdominios, páginas dentro de tu sitio web, entre otros, sin que esto represente un sobrecosto como suele pasar con el hosting convencional. Es como ser dueño de todo un edificio digital.
Una excelente alternativa es alojar los sitios web que desees en el espacio que se requiera, dejando un poco disponible en caso de que sea necesario, y el resto del almacenamiento del servidor, usarlo para crear hostings. De este modo, puedes enriquecerte por dos medios, el primero vienen a ser las visitas al website de tu propiedad alojado en el servidor dedicado, y el segundo, el monto de dinero que las personas paguen para guardar sus páginas dentro de tu servidor.